¿QUE ES EL AYUNO?AYUNO La abstinencia de comida por motivos religiosos era requisito de la Ley únicamente en el día de Expiación (Lev 16.29, 31; 23.27–32). Cada persona tenía la libertad de optar por esta práctica (2 S 12.16, 21–23). Al regreso del exilio se establecieron cuatro ayunos para recordar los días de la cautividad (Zac 7.1–7; 8.19). Más tarde, el ayuno se incluyó en la fiesta de Purim (Est 4.1–3, 15–17). Jesús aprobó el ayuno, pero hizo serias advertencias sobre su mala práctica (Mt 6.16–18; 9.14–17).
· El ayuno es para el hombre aflicción del alma
· El ayuno ante Dios es para Santificación.
El ayuno Tenia dos Propósitos ?
· El primer propósito del ayuno en el antiguo testamento era para humillarse ante Dios Pidiéndole ayuda y perdón cuando cometían pecado y falta delante de el y así evitar
el juicio y la ira de Dios cuando su paciencia llegaba al limite y cuando el pecado era para muerte. No importaba el pecado cual grande fuera, Dios lo perdonaba cuando se humillaban y se arrepentían de corazón, el ayuno lo acompañaban rasgando sus vestidos enseñando su cuerpo, rapándose la cabeza, postrados en tierra y echándose cenizas y polvo sobre su cuerpo. (Aclaración importante; cuando Dios perdonaba, simplemente les perdonaba la vida pero las consecuencias del pecado ellos mismos las pagaban los ejemplos los vemos en toda la Biblia)
· El segundo propósito era el que el hombre hacia cuando enterraban a un familiar, pariente, o amigo, que ellos amaran, como una muestra de dolor, tristeza, y respeto por aquel ser que se iba. (Lo contrario a lo de hoy que en vez de ayunar sirven alimento)
Ejemplos de la Biblia:
(1 Samuel 31:11) 11Cuando los de Jabes de Galaad se enteraron de lo que habían hecho los filisteos con Saúl, 12todos los hombres valientes se levantaron y, caminando toda aquella noche, quitaron el cuerpo de Saúl y los cuerpos de sus hijos del muro de Bet-sán, y llevándolos a Jabes los quemaron allí. 13Tomaron sus huesos, los sepultaron debajo de un árbol en Jabes y ayunaron siete días.
(2 Samuel 1:11) 11Entonces David, tirando de sus vestidos, los rasgó, y lo mismo hicieron los hombres que estaban con él. 12Lloraron, se lamentaron y ayunaron hasta la noche, por Saúl y por su hijo Jonatán,
(2 Samuel 12;15) Jehová hirió al niño que la mujer de Urías había dado a David, y enfermó gravemente. 16Entonces David rogó a Dios por el niño; ayunó David, se retiró y se pasó la noche acostado en tierra. 17Los ancianos de su casa fueron a rogarle que se levantara del suelo, pero él no quiso, ni comió nada con ellos.
(2 Cronicas 20:3) 3Josafat tuvo miedo y humilló su rostro para consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá. 4Se congregaron los de Judá para pedir socorro a Jehová;
(Esther 4:1) 1Luego que supo Mardoqueo todo lo que se había hecho, rasgó sus vestidos, se vistió de ropa áspera, se cubrió de ceniza, y se fue por la ciudad lanzando grandes gemidos, 2hasta llegar ante la puerta real, pues no era lícito atravesar la puerta real con vestido de ropa áspera. 3En toda provincia y lugar donde el mandamiento del rey y su decreto llegaba, había entre los judíos gran luto, ayuno, lloro y lamentación. Saco y ceniza era la cama de muchos.
(Salmo 35:13) 13Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí con ropas ásperas; afligí con ayuno mi alma y mi oración se volvía a mi seno.
(Salmo 69:10) 10Lloré, afligiendo con ayuno mi alma, y esto me ha sido por afrenta.11Me vestí, además, con ropas ásperas y vine a serles por proverbio.
(Joel 1:14) 14Proclamad ayuno, convocad asamblea, congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová, vuestro Dios, y clamad a Jehová.
(Joel 2:12) 12»Ahora, pues, dice Jehová, convertíos ahora a mí con todo vuestro corazón, con ayuno, llanto y lamento.
(Joel 2:15) 15¡Tocad trompeta en Sión, proclamad ayuno, convocad asamblea.
(Jonas 3:15) 5Los hombres de Nínive creyeron a Dios, proclamaron ayuno y, desde el mayor hasta el más pequeño, se vistieron con ropas ásperas. 6Cuando la noticia llegó al rey de Nínive, este se levantó de su silla, se despojó de su vestido, se cubrió con ropas ásperas y se sentó sobre ceniza.
El Propósito del ayuno en el nuevo Testamento
· El ayuno en el nuevo testamento Cristo lo instituyo como una necesidad para la preparación y fortaleza espiritual del Cristiano, (Marcos 2:19)
· Pero para los escribas y fariseos de ese tiempo era simplemente un acto de aparente santidad ante los hombre y no ante Dios. (Mateo 6:16)
· Antes de que Jesús lo instituyera a los Discípulos los seguidores de Juan el Bautista ya lo Practicaban. (Marcos 2:18)
(Marcos 2:18) 18 Los discípulos de Juan y los de los fariseos estaban ayunando. Entonces fueron y le preguntaron:
—¿Por qué los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunan,
(Mateo 6:16)16»Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas que desfiguran sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. 17 Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, 18 para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará en público.
(Marcos 2:19) Acaso pueden ayunar los que están de bodas mientras está con ellos el esposo? Entre tanto que tienen consigo al esposo, no pueden ayunar. 20 Pero vendrán días cuando el esposo les será quitado, y entonces, en aquellos días, ayunarán.
(Hechos 14:22) 22 confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándolos a que permanecieran en la fe y diciéndoles: «Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios». 23 Constituyeron ancianos en cada iglesia y, después de orar y de ayunar, los encomendaron al Señor en quien habían creído.
el propósito del ayuno es el de afligir el alma ante Dios humillándonos y dándole lugar para que nos prepare nos santifique nos use con su poder. Pero debe de ir acompañando de oración y de lectura de su palabra. Ya que es el proceso de comunión con Dios.
El ejemplo claro lo dio Jesús al irse al desierto para ayunar por 40 días y 40 noches.
(Lucas 4:1) 1Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán y fue llevado por el Espíritu al desierto 2por cuarenta días, y era tentado por el diablo. No comió nada en aquellos días, pasados los cuales tuvo hambre.
(Mateo 4:1) 1Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. 2Después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, sintió hambre. 3Se le acercó el tentador y le dijo:
—Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
(Marcos 1:12) 12Luego el Espíritu lo impulsó al desierto. 13Y estuvo allí en el desierto cuarenta días. Era tentado por Satanás, y estaba con las fieras, y los ángeles lo servían.
· El ayuno debe ser reverente, con una vida piadosa delante de Dios. Con esto no se quiere decir que el hombre tiene que ser perfecto, pero antes de ofrecer ayuno a Dios debemos estar conscientes de que primero estemos a cuentas con nuestro hermano o nuestro prójimo y estemos libres de rencillas, pleitos, amargura, ira, enojo, que anide en nuestro corazón. Con esto me refiero a que no guardemos enojo, celos, rencor, venganza, en el corazón.
(Por que los pleitos, los enojos y los desacuerdos, el enemigo siempre los pone por delante de nosotros para caída y aflicción de espíritu pero no les debemos dar cabida para que aniden.) (Efesios 4:26) 26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, 27ni deis lugar al diablo.
EL Ayuno que Dios Escogió
(Isaias 58:5) para que vuestra voz sea oída en lo alto.
5 ¿Es este el ayuno que yo escogí:
que de día aflija el hombre su alma,
que incline su cabeza como un junco
y haga cama de telas ásperas y de ceniza?
¿Llamaréis a esto ayuno y día agradable a Jehová?
6 El ayuno que yo escogí,
¿no es más bien desatar las ligaduras de impiedad,
soltar las cargas de opresión,
dejar ir libres a los quebrantados
y romper todo yugo?
7 ¿No es que compartas tu pan con el hambriento,
que a los pobres errantes albergues en casa,
que cuando veas al desnudo lo cubras
y que no te escondas de tu hermano?
8 Entonces nacerá tu luz como el alba
y tu sanidad se dejará ver en seguida;
tu justicia irá delante de ti
y la gloria de Jehová será tu retaguardia.
9 Entonces invocarás, y te oirá Jehová;
clamarás, y dirá él: “¡Heme aquí!
Si quitas de en medio de ti el yugo,
el dedo amenazador y el hablar vanidad,